La verdad detrás de la escena de cama entre Lee Si An y Yuk Jun Seo en ‘Single’s Inferno 4’
¿Escándalo o simplemente malentendido con manta incluida? La cuarta temporada de Single’s Inferno ha dado mucho de qué hablar, pero sin duda una de las escenas más virales fue esa noche que Lee Si An y Yuk Jun Seo compartieron cama. Sí, la misma que hizo explotar los comentarios en redes sociales y desató todo tipo de teorías.

Lee Si An, una de las participantes más comentadas del programa, se sentó esta semana en el panel de Radio Star de MBC junto a Woo Hee Jin, Hwang Dong Joo y Mimi de Oh My Girl. Y ahí, sin pelos en la lengua, habló por primera vez sobre el tan comentado episodio con Yuk Jun Seo.
“Creo que fui la responsable de los momentos más emocionantes de Single’s Inferno 4”, soltó entre risas.
Y sí, nadie lo niega. Pero lo que encendió el chisme fue esa escena donde ambos terminaron bajo las sábanas durante la “cita nocturna”. Según ella, todo fue mucho más inocente de lo que parecía.
“Solo nos tomamos de la mano mientras dormíamos. Solo eso. Nada más.”, repitió, dejando claro que no pasó nada subido de tono.
Pero claro, eso no impidió que la audiencia se imaginara de todo. Algunos pedían que “quitaran la manta”, otros estaban convencidos de que había tensión sexual en el aire. Y la presión llegó incluso a su casa.
“Mi mamá me llamó y me dijo: ‘Si te critican, es porque el programa va bien. Piensa como productora’”, confesó, tomándoselo con humor.
La guinda del pastel llegó cuando Mimi, entre risas y con picardía, lanzó la pregunta que todos querían hacer: “¿Pero ustedes dos están saliendo o qué?”
Ahí Si An dudó un segundo… y soltó la típica respuesta que deja a todo el mundo aún más confundido:
“Somos muy unidos… como hermanos.”
“Comemos juntos, salimos seguido, nos cuidamos mucho… pero es una relación de hermandad”, insistió.
Vamos, que amistad intensa sí, pero romance confirmado, todavía no.
Lo cierto es que la escena ya es parte del imaginario colectivo de Single’s Inferno, y aunque muchos creyeron ver fuegos artificiales, Lee Si An asegura que solo fue una noche tranquila de manos entrelazadas y cero acción.